Mente.

Si buscáramos en el infinito cielo, la inmensidad del universo, encontraríamos la similitud con nuestra mente, vasta de espacio, compleja y hermosa, confusa y desconocida.

Tomaría de cada estrella su brillo, su alma, y la colocaría en un lugar donde nunca morirá, ni siquiera los mas siniestros pensamientos. Si pudiera sacar del universo cada agujero negro, lo colocaría en mi mente, para borrar todo recuerdo malicioso y enfermizo. Tomaría los planetas mas sublimes, espectaculares y extravagantes y los colocaría detrás de mis ojos, para ver todo de la manera mas impresionante jamas vista.

Si dejara que el universo viajase a través de mi mente y actuara de forma impredecible, precipitada, sentiría que mi espíritu finalmente se sentiría libre, como aquella estrella que en la inmensidad flota dejando mostrar su increíble belleza y misteriosa excentricidad.